El primer partido se disputó el 4 de julio en Montreal ante el Concordia canadiense en el Molson Stadium con resultado final de empate a un gol. En julio de 1951 se iniciaron las obras de ampliación de Sarriá, y el estadio, que pertenecía a la familia de La Riva, pasó a ser propiedad del R. C. D. Español que presidía Francisco Javier Sáenz. Gestándose la creación de un campeonato nacional de liga en el país, los españolistas consiguieron vencer su primer Campeonato de España de Copa, que les otorgó el derecho a ser uno de los participantes en la primera edición de la liga que tuvo inicio esa misma temporada; siendo así uno de los 10 equipos con el privilegio de haber participado en histórica edición.
Fue así como la entidad pasó a ser polideportiva y acogió nuevas ramas deportivas entre el ya reconocido football, merced sobre todo a la labor de Emili Sampere -uno de los jugadores que se marchó al X Sporting Club- y Julià Clapera -fundador del Club Español de jiu-jitsu-. Con la retirada de los grandes nombres, que sin embargo no mermaron la capacidad del equipo, figuraban en el plantel el capitán Pere Gibert o Emilio Sampere únicamente como grandes referencias. Al final de la temporada 1928-29, se homenajeó a Patricio Caicedo, quien se convirtió durante muchos años en el entrenador del equipo, mientras que en contraposición de las alegrías, hubo que lamentar el traspaso de Zamora al Real Madrid Club de Fútbol en el año 1930 por la cifra récord de 100 000 pesetas de la época, tras haber sido la más destacada figura del plantel durante la década.
Durante el conflicto bélico, el club participó en dos campeonatos amistosos. 2009 – El escudo no se volvió a modificar hasta 2009. En esta fecha el club decidió volver a estrechar el escudo horizontalmente, volviendo a las dimensiones de la fundación del club. Esta situación se mantuvo hasta el año 1909, fecha en la que algunos de los jugadores emigrados volvieron a Barcelona para encontrarse con un panorama desolador. En la Liga Mediterránea de fútbol, también disputada en 1937, el R. C. D. Español acabó en segundo lugar en una liga de ocho equipos a tan sólo un punto del campeón, el Football Club Barcelona.
En el Copa de la España Libre de 1937, el conjunto blanquiazul quedó en tercer lugar de una liga de cuatro equipos, por delante del Gerona Football Club y por detrás del Valencia Football Club y del Levante Football Club, este último ganador del torneo. El jugador conquistó con el club el Campeonato de Cataluña de 1918, y que sería el último del club antes de una larga sequía propiciada por la marcha de cuatro de sus mejores futbolistas, entre los que se encontraba el guardameta. La referencia tomada fue la del escudo de armas del almirante Roger de Lauria, héroe militar de la Corona de Aragón que frenó la conquista de los franceses de Cataluña.
A lo largo de su historia, Cataluña nunca ha jugado torneos internacionales de carácter oficial como la Copa Mundial de Fútbol o la Eurocopa, debido a que no es una selección reconocida ni por FIFA ni por UEFA. Con el nuevo carácter y los nuevos integrantes de la renacida entidad, el 20 de febrero de 1910, en la asamblea general, se cambió la denominación del la entidad a Club Deportivo Español, además de variar el color blanco del antiguo uniforme por uno a rayas blanquiazules, completado con un calzón y medias negras a propuesta del socio Eduard Corrons. En 1939, el club empezó a utilizar de nuevo su denominación real.
En 1931, con la instauración de la Segunda República Española, equipos de futbol al azar el club pierde su condición de Real. Frank Allack, William Hodge y Raine Gibson fueron los que marcaron el rumbo hacia el profesionalismo del club, hasta entonces regido por condición de amateur, y al que se unirían después los hermanos Charles y Percival Wallace. Los hermanos De La Riva compraron por 170 000 pesetas de la época la finca Manigua de Can Rabia en la antigua carretera de Sarriá.
El 31 de diciembre de 1922 se colocó la primera piedra y el 18 de febrero de 1923 se inaugura el Estadio de Sarriá con un encuentro que acabó 4-1 contra la Unió Sportiva de Sans, siendo el centrocampista españolista Vicente Tonijuán el autor del primer gol. En diciembre de 1949 el R. C. D. Español se desplaza a Filipinas donde juega una serie de encuentros amistosos. El primer acto de dicha efeméride fue un partido de béisbol que enfrentó al R. C. D. Español contra el equipo norteamericano del Wiesvaden Flyers y que terminó con victoria visitante por 19 carreras a 5. El partido de fútbol de conmemoración se juega el 29 de marzo contra el Malmö FF sueco, en el que el conjunto blanquiazul se impuso por 3 goles a 2 con una alineación que mantenía la filosofía inicial de no incorporar jugadores extranjeros.